Contra el paro: ¡Hay que prohibir los despidos!

Εκτύπωση
Septiembre de 2022

No bien se acerca el fin del verano y ya se están presentando en algunos medios las malas cifras para el empleo. El mes de agosto es cuando suele finalizar el grueso de los contratos de la temporada de verano. Según datos del Ministerio de Trabajo, se destruyeron 40.428 puestos de trabajo. Esta pérdida de empleo en un solo mes elevó el número de trabajadores desempleados hasta casi los tres millones de trabajadores.

Siguiendo con los datos del Ministerio de Trabajo, en agosto se firmaron 1.283.791 contratos, suponen 371.724 contratos menos que en julio. Respecto a al año pasado en ese mes se firmaron 123.772 contratos menos. En cuanto al número de contratos indefinidos firmados, estos han sido de 506.731, tan solo uno de cada cuatro.
Julio también tuvo muy malas cifras en cuanto al mantenimiento de los puestos de trabajo, pues arroja 7.366 cotizantes menos, aumentando en 3.230 desempleados más que en junio. El Gobierno sigue sin dar una, pues dice que ese retroceso puede deberse a que parte de las contrataciones se adelantaron a junio y al fin de los contratos a profesores tras el curso escolar.

Por sectores, el paro ha castigado a trabajadores de sectores de la construcción, la industria y sobre todo en servicios, donde se ha perdido 37.546 puestos de trabajo. Y sobre todo el paro vuelve a ensañarse en las mujeres y en los jóvenes.

Dejando a un lado el período vacacional, en líneas generales la patronal sigue prefiriendo las contrataciones en modalidad de fijo-discontinuo y a tiempo parcial, siguiendo lo marcado por la última reforma laboral. Sigue prefiriendo contratar a trabajadores por menos horas, donde las horas salen más baratas. Esto solo demuestra que la precariedad laboral continuará y que la reforma laboral está pensada para favorecer sobre todo al empresario.
Estas cifras son un ejemplo que a las y los trabajadores no les vale reforma laboral alguna, y que la única salida a esta situación es una verdadera planificación de la economía y del empleo: ¡Hay que prohibir los despidos, utilizar los beneficios de la patronal para crear empleo, y repartirlo entre todos los trabajadores sin bajar los salarios!